Cómo vestir a un recién nacido en verano: comodidad, frescura y mucho amor

La llegada del verano, además de numerosos planes y salidas al aire libre, también implica una subida notable de las temperaturas. Si acabas de dar la bienvenida a tu bebé, es natural preguntarte: ¿cómo debo vestirle para que esté fresquito y cómodo? A continuación, te damos las claves para que tu recién nacido disfrute del verano bien vestido, protegido y cómodo.

Elige tejidos frescos y suaves: el primer gran paso

Elegir prendas confeccionadas con tejidos naturales como el algodón o el lino, que además de ser ligeras y transpirables, permiten que la piel del bebé respire con total libertad, evitando así posibles irritaciones.

Estos materiales son especialmente recomendables para los recién nacidos, ya que se adaptan con suavidad a su cuerpo y no contienen fibras sintéticas que puedan causar molestias o reacciones en su delicada piel. Apostar por este tipo de tejidos es una opción idónea para asegurar su bienestar durante los días más calurosos del año.

Prendas prácticas, cómodas y fáciles de poner

Durante los primeros meses, cambiar el pañal es una tarea constante, por lo que resulta fundamental optar por prendas que faciliten esta tarea. La mejor opción es aquellas que incorporan botones a presión o aperturas estratégicas, que permiten vestir y desvestir al bebé sin necesidad de manipularlo en exceso ni interrumpir su descanso.

En este sentido, los peleles bebé con apertura en la entrepierna o los conjuntos tipo ranita con tirantes son verdaderos aliados para el día a día. No solo hacen más cómodos los cambios de pañal, sino que también ofrecen libertad de movimiento, ideal para que tu peque esté cómodo en cualquier momento del día.

Otros imprescindibles para el verano

A la hora de completar el ajuar de bebé para los meses de calor, hay piezas que resultan imprescindibles por su versatilidad y funcionalidad. Las mantitas ligeras son perfectas para envolver al bebé con suavidad cuando las temperaturas descienden levemente al anochecer o protegerlos de cambios de temperatura bruscos causados por aires acondicionados. También son muy útiles para crear sombra en el carrito o cubrir el hombro de mamá durante las tomas, convirtiéndose en un básico imprescindible en cualquier bolsa de paseo.

Los gorritos, son esenciales para proteger la cabecita del sol en cada paseo, mientras que los conjuntos de dos piezas —como pantaloncitos y camisetas holgadas— permiten regular la temperatura corporal con mayor facilidad, adaptándose a los cambios de clima a lo largo del día.

Si estás pensando en llevar al bebé a la playa o la piscina, te recomendamos hacerlo fuera de las horas centrales del día, cuando el sol es más intenso. Las primeras horas de la mañana o el final de la tarde son ideales para disfrutar del aire libre con seguridad. Para esos momentos, opta siempre por gorritos con visera y ropa de baño, como camisetas de manga larga confeccionadas en tejidos ligeros, frescos y de secado rápido, que protegen su piel sin restarle libertad para moverse y explorar.

Con estos pequeños consejos, vestir a tu bebé en los días más calurosos será mucho más sencillo y bonito. Así, su primer verano se convertirá en una experiencia cómoda, segura y, sobre todo, inolvidable.